Saliendo por el sur de Pichilemu hacia Punta de Lobos se encuentra el Aeródromo de Pichilemu, pista área municipal que es administrada en comodato por el Club Aéreo de Pichilemu, institución fundada el año 1964 que en su apogeo logró contar con tres aeronaves, realizaban simposios en el cual se congregaba a una gran cantidad de avionetas y gente aficionada, señala don Eduardo Saldías, socio directivo con más de 30 años en la institución.
Hombre de las comunicaciones y también directivo del Club, don Jorge Nasser, destaca que existe un “concepto errado del Club en la comunidad local”, explicando que cualquiera persona con afición a la aviación puede acercarse y ser socia del club, independiente de su situación económica. A esto agrega que el Club ofrece múltiples servicios a la comunidad, como por ejemplo vuelos demostrativos o populares que sostienen la Escuela de Vuelo, vuelos de emergencias como por ejemplo para el traslado de enfermos o situaciones de catástrofes como el Megaincendio de 2017 o el Terremoto del 27F, además de actividades abiertas a escuelas de la zona y su nueva iniciativa “Club de Aguiluchos”, enfocada en niños aficionados a la aviación.
“El Club Aéreo tomo el rol de administrador de la pista que fue puesta a disposición de la comunidad y como puente aéreo para la actividad aeronáutica a nivel nacional. Ahora asumimos puros jóvenes pichileminos, nos propusimos el desafío de reestructurar, ordenar y rescatar la historia del club. Queremos acercarnos a la gente”, señala Williams Castro, director y secretario adjunto.
Una de sus líneas estratégicas es el fortalecimiento de la Escuela de Vuelo que hoy ya cuenta con su primer piloto 100% formado en Pichilemu, se trata de Felipe Pavez Polanco (33) quien también preside la institución y es el piloto permanente con residencia en Pichilemu en el caso de vuelos de emergencia.
Felipe nos cuenta que “si vuelas en Pichilemu puedes volar en cualquier parte del mundo”, puesto que el “viento, las condiciones climáticas, el cruce de gente y otros varios factores se deben tomar en cuenta al momento de aterrizar acá”, lo que es reforzado por su instructor, el experimentado piloto Daniel Pérez: “el piloto que se forma acá saca muy buena mano, de hecho traigo a pilotos de otras partes de Chile a practicar a Pichilemu”.
El Club Aéreo de Pichilemu constantemente realiza actividades durante los fines de semana, con el fin de mostrar sus aviones e incentivar a las nuevas generaciones el gusto por la aviación. ¡Te invitamos a conocer el Club Aéreo de Pichilemu!
